“Yapacaní en principio no cooperó, pero se pudo hacer entender y empezó la gente a cooperar; (…) debo entender que San Julían también ya acató las determinaciones de los decretos supremos de la lucha contra este enemigo invisible que es el COVID-19”, dijo anoche en el programa “Diálogos y Debates” de Bolivia TV.
Según Rojo, designado como delegado presidencial en Santa Cruz para coordinar acciones en la actual emergencia sanitaria, el cambio de actitud de los pobladores de esos dos municipios, identificados como “reductos” del Movimiento Al Socialismo (MAS), se registró entre el pasado viernes y sábado.
Los primeros dos casos del coronavirus en Bolivia se reportaron el 10 de marzo y la presidenta Jeanine Añez activó una serie de medidas para contener la pandemia. Incluso, el pasado 25 de marzo, declaró estado de emergencia sanitaria y endureció las medidas para hacer cumplir la cuarentena.
Hasta la fecha los casos confirmados de la pandemia suman 81 en el país, es decir, 44 en Santa Cruz, 14 en Cochabamba, 10 en La Paz, 8 en Oruro, 3 en Potosí, 1 en Chuquisaca y 1 en Pando.
