La alcaldesa interina, Angélica Sosa aseguró que se reforzarán los operativos en mercados, transportes y actividades nocturnas. Destinarán más de 2.800 funcionarios. La máxima autoridad aseguró que si el caso lo amerita, se podría volver a cuarentena rígida.
La alcaldesa interina del Gobierno Municipal cruceño, Angélica Sosa, aseguró que en este periodo de transición de gestión se reforzarán los controles de locales las 24 horas y se sancionará a los infractores. De hecho, indicó que se realizarán evaluaciones periódicas y “si el caso lo amerita, vamos a entrar en una cuarentena rígida”.
Actualmente, la ciudad está en cuarentena dinámica, es decir, la circulación del transporte es permitidas las 24 horas y todas las actividades están permitidas solo hasta las 23:00.
Entre las áreas donde se reforzarán los operativos están los espacios públicos alrededor de mercados, el transporte público y actividades nocturnas, como rocolas y diversos boliches.
La Alcaldía mantiene vigente un espacio para la realización de las pruebas de antígeno nasal en el Cambódromo. Durante toda la semana, desde las 7:00 hasta las 23:00, las brigadas médicas municipales realizan los diagnósticos de manera gratuita.
En el informe epidemiológico municipal se detalló un incremento de la positividad en las pruebas rápidas de 4% a 7.9%.
El presidente del Comité de Operaciones de Emergencia Municipal (COEM), Emiliano Cronenbold aclaró que, desde esta semana, los negocios nocturnos que sean clausurados será de forma definitiva. En anteriores operativos se sancionaba con cierre temporal.
Para los diversos operativos la comuna destinará más de 2.800 funcionarios, divididos en tres turnos.
El fin de semana se reunió el Gabinete municipal para evaluar las acciones de prevención ante el riesgo que supone para la población el ingreso de una nueva cepa de coronavirus desde Brasil.
Declaraciones de la alcaldesa
Sosa reconoció que las calles despejadas de los antiguos mercados fueron notoriamente invadidas desde el 8 de marzo, por lo que reforzarán los controles para liberar los espacios públicos.
“Costó mucho a la ciudad el traslado de 40.000 comerciantes a grandes mercados, con gran inversión. Hemos visto con gran preocupación que a partir del 8 de marzo empiezan personas a asentarse, no lo vamos a permitir en este periodo de transición”, sostuvo.
A los controles en mercados se sumará la verificación de precios debido al aumento de comercio por época de Semana Santa.
En las últimas semanas, las calles de los antiguos mercados La Ramada, Los Pozos y Abasto fueron nuevamente ocupadas por comerciantes ambulantes. Incluso los vendedores instalaron puestos improvisados en el antiguo La Ramada.
Los controles al transporte público verifican que cada bus solo lleve pasajeros sentados, que el conductor tenga una mampara y que tenga desinfectante a disposición de los pasajeros.
Por Leyla Mendieta
Fuente: El Deber
