El Gobierno plantea crecimiento con una menor inversión pública

Ministro Montenegro

El presupuesto estatal de 2023 establece que la inversión en infraestructura caerá en 35,98%, la multisectorial en 33,2% y la productiva en 21,51%. La inversión social es la única que crecerá con 18,79%.

El proyecto de Presupuesto General del Estado (PGE) prevé un crecimiento “optimista” de la economía similar al proyectado para este año, pero con una inversión pública notoriamente menor a la planificada también para esta gestión. Economistas cuestionan que se pretenda impulsar la expansión del PIB con un mayor gasto social.

El lunes, el Gobierno presentó el proyecto de Ley Financial 2023, que apuesta por una expansión del 4,86% del Producto Interno Bruto, menor al 5,1% proyectado para este año; y a una inversión pública a $us 4.006 millones, lejana a los $us 5.015 millones prevista también para el 2022.

Germán Molina, miembro de la Academia Boliviana de Ciencias Económicas, expresó su sorpresa porque —en un contexto de reducción de ingresos— el PGE 2023 proyecta un crecimiento casi igual al calculado para este año, con una inversión pública que caerá en más de $us 1.000 millones.

“Desde el punto de vista de la teoría económica, para que crezca la economía tiene que crecer la inversión pública y privada, y la pública no va a crecer”, aseveró.

El crecimiento económico no se impulsa con gasto, sino con inversión, coincidió Fernando Romero, presidente del Colegio de Economistas de Tarija.

La información oficial detalla que en 2023 la inversión en infraestructura caerá en un 35,98%, la multisectorial en el 33,2% y la productiva en 21,51%. La social es la única que crecerá con el 18,79%.

Política garantizada

La inversión social se destinará al pago de los bonos Juana Azurduy, del Juancito Pinto y para las personas con discapacidad, así como a la Renta Dignidad y al subsidio prenatal. Según el Ministerio de Economía, el pago está asegurado “para preservar el bienestar de la población más vulnerable”.

“Nuestras políticas sociales están incorporadas en el presupuesto y están plenamente garantizadas”, remarcó el titular de esa cartera, Marcelo Montenegro.

Para Molina, no es “coherente” que sea la inversión social la única que crezca, en desmedro de las demás. “Si baja la inversión productiva y en infraestructura, ¿cómo va a crecer la economía? Estarían apostando a que los bonos hagan crecer la economía y no es así. Los bonos, que llegan a sectores de ingresos bajos y fijos, son simplemente un gasto, porque no tienen un efecto multiplicador”, señaló.

Los bonos incentivan “muy poco” la producción. La mayor parte va al contrabando, dijo Romero.

El analista Gonzalo Chávez consideró que “muchos de los fundamentos del Gobierno para el PGE 2023 no se sustentan”.

“Cuando uno ve la ejecución de la inversión pública” de los últimos años (que no es elevada), “tiene que dudar razonablemente que se cumpla la ejecución de $us 4.000 millones para 2023; e igual con la tasa de crecimiento”, indicó.

Molina insistió en que “no hay fundamentos económicos” para que, en un momento en que caen la inversión pública y los ingresos por la exportación de gas, “se concrete un crecimiento de 4,86%”.

“Esa estimación es muy optimistas respecto a las de organismos internacionales”, acotó.

Para el Ministerio de Economía, el proyecto del PGE busca garantizar la estabilidad macroeconómica y sostenibilidad de las finanzas públicas, profundizar el proceso de industrialización con sustitución de importaciones, fortalecer el aparato productivo con políticas de incentivo y fomento a la productividad, y continuar con la ejecución de políticas sociales con la redistribución de excedentes.

Fuente: El Deber

Comentarios