Constructores y Gobierno firman acuerdo para impulsar Plan de Empleo.

Foto: Archivo / Página Siete

Uno de los pilares de la reactivación económica impulsada por el Gobierno de transición toma forma. Se trata del Plan de Empleo que empieza a dar destellos de su implementación con un acuerdo interinstitucional firmado hoy entre la Cámara de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz) y el Ministerio de Trabajo.

El titular de dicha cartera de Estado, Óscar Mercado, sostuvo que el programa apunta a generar 11.000 oportunidades laborales para un periodo que abarca entre tres y seis meses. Para ello existe un presupuesto de $us 19 millones.

“Este plan tiene un doble impacto, las personas tienen la oportunidad de trabajar y las empresas o instituciones tienen un trabajador cuyo salario cubrirá el Estado”, puntualizó la autoridad.

El presidente de Cadecocruz, Aldo Sülzer Limpias, resaltó que este acuerdo incentivará la reactivación del sector constructor, que ha sido muy golpeado por la pandemia y la emergencia sanitaria.

El ejecutivo recordó que el sector constructor del país genera casi medio millón de fuentes de trabajo directas y más de un millón y medio de empleos indirectos.

Los empresarios serán los encargados de exponer la necesidad de mano de obra (profesionales y no profesionales), por lo que el número de fuentes de empleo dependerá de la demanda sectorial, según Mercado.

“No es un programa para pagar a quienes ya están trabajando, el requisito es que sean nuevos trabajos”, enfatizó el ministro, a tiempo de agregar que la iniciativa tiene el soporte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Los constructores también recordaron que el sector público adeuda Bs 2.500 millones por concepto de pagos de planillas de avance de obras. “Pagar estas deudas es fundamental para que las empresas puedan pagar proveedores, planillas, créditos y una serie de obligaciones”, resaltaron desde Cadecocruz.

Así se podrá dinamizar la economía y las empresas constructoras que actualmente están con iliquidez y literalmente asfixiadas por la falta de pago de las entidades públicas, según Sülzer.

El Deber.

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